
Pegasos, lindos pegasos,
caballitos de madera...
Yo conocí siendo niño,
la alegría de dar vueltas
sobre un corcel colorado,
en una noche de fiesta.
En el aire polvoriento
chispeaban las candelas,
y la noche azul ardía
toda sembrada de estrellas.
¡Alegrías infantiles
que cuestan una moneda
de cobre, lindos pegasos,
caballitos de madera!.
Antonio Machado
1 comentario:
cabros chicos ..son remlinos que cambian la vida y llenan de alegría....son capsulitas de vida...
saludos Diana...
terribles kisses
Publicar un comentario