La primera infancia es la etapa en la que se establecen las habilidades motoras básicas, se completa el desarrollo perceptivo y se ponen las bases para el desarrollo de las habilidades cognitivas. La progresión en la adquisición de estas habilidades y capacidades están en gran parte determinada por los rasgos psicoevolutivos que marcan las posibilidades de la etapa infantil.
En primer lugar, el pensamiento de niños y niñas es el motor del desarrollo cognitivo
En segundo lugar las necesidades infantiles pasan por aspectos fisiológicos o biológicos o por necesidades de primer orden (alimentación, temperatura adecuada, actividad)
Los niños necesitan comer, beber, dormir, descansar, estar en contacto con el aire y la luz del sol.
También tienen necesidades de tipo sicológico, como la seguridad, la afectividad, la actividad y el movimiento.
Para que la educación infantil posea un real carácter educativo, debe contemplar ciertos requisitos como:
La formación: De los educadores, se debe tratar de profesionales cualificados que sepan valorar críticamente todas las posibles alternativas pedagógicas.
La planificación de las acciones a desarrollar y su consecuente evaluación. Se debe organizar las intenciones educativas y cual será la manera de ejecutarlas. Programando contenidos, objetivos y actividades en un marco de flexibilidad curricular.
La utilización de recursos didácticos: debemos tener material adecuado y suficiente para el desarrollo de nuestras propuestas.
La coordinación con la familia: Dicha interacción debe ser constante e ir destinada a dar coherencia y continuidad a la acción educativa.
Los canales de comunicación deben ser fluidos y flexibles, para crear puntos en común, especialmente relacionados con nuestros niños.
La individualización: la observación del desarrollo motriz, cognitivo, lingüístico, afectivo y social de cada niño, ayudará a adecuar las propuestas educativas que le ofrecemos más allá de las actividades ofertadas al grupo general.
El trabajo con la experiencia directa, con el entorno y a partir de lo que estos aportan como fruto de sus experiencia.
La preparación de un ambiente que invite a los niños, le cree pequeños retos, les de seguridad, les invite a explorar, les ayude a establecer relaciones de grupo.
Es importante la creación de agrupaciones de niños que faciliten su máximo crecimiento.
El trabajo en grupo de los educadores es un elemento imprescindible para lograr un proyecto educativo de calidad
Cultura colaborativa y voluntad de cooperación.
En primer lugar, el pensamiento de niños y niñas es el motor del desarrollo cognitivo
En segundo lugar las necesidades infantiles pasan por aspectos fisiológicos o biológicos o por necesidades de primer orden (alimentación, temperatura adecuada, actividad)
Los niños necesitan comer, beber, dormir, descansar, estar en contacto con el aire y la luz del sol.
También tienen necesidades de tipo sicológico, como la seguridad, la afectividad, la actividad y el movimiento.
Para que la educación infantil posea un real carácter educativo, debe contemplar ciertos requisitos como:
La formación: De los educadores, se debe tratar de profesionales cualificados que sepan valorar críticamente todas las posibles alternativas pedagógicas.
La planificación de las acciones a desarrollar y su consecuente evaluación. Se debe organizar las intenciones educativas y cual será la manera de ejecutarlas. Programando contenidos, objetivos y actividades en un marco de flexibilidad curricular.
La utilización de recursos didácticos: debemos tener material adecuado y suficiente para el desarrollo de nuestras propuestas.
La coordinación con la familia: Dicha interacción debe ser constante e ir destinada a dar coherencia y continuidad a la acción educativa.
Los canales de comunicación deben ser fluidos y flexibles, para crear puntos en común, especialmente relacionados con nuestros niños.
La individualización: la observación del desarrollo motriz, cognitivo, lingüístico, afectivo y social de cada niño, ayudará a adecuar las propuestas educativas que le ofrecemos más allá de las actividades ofertadas al grupo general.
El trabajo con la experiencia directa, con el entorno y a partir de lo que estos aportan como fruto de sus experiencia.
La preparación de un ambiente que invite a los niños, le cree pequeños retos, les de seguridad, les invite a explorar, les ayude a establecer relaciones de grupo.
Es importante la creación de agrupaciones de niños que faciliten su máximo crecimiento.
El trabajo en grupo de los educadores es un elemento imprescindible para lograr un proyecto educativo de calidad
Cultura colaborativa y voluntad de cooperación.
3 comentarios:
Se ven preciosos todos asi disfrazados!
Muchas gracias Lena...
Se agradece el post. Todos esos factores son esenciales.
La foto final también se agradece, por linda.
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