
Cuando estamos en actividades con mis niños, y de pronto me sorprendo con algunas caritas tristes o con alguna rabieta o pelea entre ellos. Aparece en acción una nueva tía, creada espontáneamente por mí, con una voz ronca y graciosa, los niños la primera vez se impactaron y luego de eso vinieron sus carcajadas, las penas y enojos se pasan, entonces mis bellos niños le dan la bienvenida a la “tía María”.
Verlos reír es una terapia para mí, verlos felices y contagiarse unos a otros, no es algo que me propongo, solo es algo que se da en forma natural. A veces interrumpen la jornada y quieren contar un chiste y todos nos reímos.
La risa finalmente no solo es algo ajeno, sino que forma parte de nuestras actividades diarias. Leí por ahí que existe una terapia llamada “Yoga de la risa”. Se trata de un grupo de personas sentadas en círculos y la instrucción es mirarse unos a otros por algunos minutos y libremente reír. Estos minutos de risa se mezclan con respiraciones yoguicas. La idea de esta terapia es hacer sentir como niños jugando, lo cual me hizo pensar inmediatamente en mis niños y sus carcajadas.
Esta teoría fue creada en 1995 por el médico indio Madam Kataria.
Los beneficios de este tipo de yoga son variados, reduce la presión arterial, disminuye el cortisol, la hormona del estrés, aumenta las emociones positivas y baja las negativas.
Yo creo que todos deberíamos sonreír mucho, en cualquier lugar, en el trabajo, nuestra casa, pasarlo bien siempre, reírnos con todos y de todo, ser un poco niño. Cosquillas, chistes, inventos imitaciones, o solo mirarnos positivamente y sonreír.

Verlos reír es una terapia para mí, verlos felices y contagiarse unos a otros, no es algo que me propongo, solo es algo que se da en forma natural. A veces interrumpen la jornada y quieren contar un chiste y todos nos reímos.
La risa finalmente no solo es algo ajeno, sino que forma parte de nuestras actividades diarias. Leí por ahí que existe una terapia llamada “Yoga de la risa”. Se trata de un grupo de personas sentadas en círculos y la instrucción es mirarse unos a otros por algunos minutos y libremente reír. Estos minutos de risa se mezclan con respiraciones yoguicas. La idea de esta terapia es hacer sentir como niños jugando, lo cual me hizo pensar inmediatamente en mis niños y sus carcajadas.
Esta teoría fue creada en 1995 por el médico indio Madam Kataria.
Los beneficios de este tipo de yoga son variados, reduce la presión arterial, disminuye el cortisol, la hormona del estrés, aumenta las emociones positivas y baja las negativas.
Yo creo que todos deberíamos sonreír mucho, en cualquier lugar, en el trabajo, nuestra casa, pasarlo bien siempre, reírnos con todos y de todo, ser un poco niño. Cosquillas, chistes, inventos imitaciones, o solo mirarnos positivamente y sonreír.
